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La Poesía de Dios


Después de mucho tiempo de dedicarme a la poesía y de haber sido galardonado con un premio nacional y de haber participado en un sin número de lecturas, asambleas, mesas redondas. Ejerciendo la palabra como medio de glorificar el arte humano. Con todo eso y muchas otras  Frivolidades , uno se vuelve pequeñito e Insignificante basurilla cuando se lee Isaías 53 y, es que poéticamente hablando este capítulo es la cúspide de cualquier ejercicio literario, toda la poesía del mundo confluye y gira alrededor de su núcleo y todos los elementos posibles danza perfectamente equilibrados haciendo de cada versículo un universo inagotable.
Pero su valor no queda nada mas en lo verbal, sino mas bien en lo real, pues Isaías 53 más que un acto escritural, es un acto de entrega desmedido jamás visto. El autor de Isaías dice en su capítulo
52: 15 así asombrará él a muchas naciones; los reyes cerrarán ante él la boca, porque verán lo que nunca les fue contado, y entenderán lo que jamás habían oído.
Los humanos jugamos a poetizar y crear mundos con las experiencias profundas que nos depara la vida y aunque van cargadas de un sentido real, nada puede compararse con el Verbo de Dios, pues este no es un murmullo de un ser solitario, al contrario es una espada de doble filo que penetra hasta partir el alma y el espíritu.

En Isaías 53 su poder no radica en lo semántico, pues este no es un poema propiamente literario sino más bien literal. Hablamos de la Palabra como un poder que vivifica y transforma. Por eso este poema no quiere ser un canto grandilocuente imitando los grandes cantares humanos.

Aquí el verbo se presenta como raíz de tierra seca, sin ningún atractivo o bonito parecer y sin que nadie; ni la muerte, ni la vida, ni principados ni potestades, ni lo presente ni lo por venir. Puedan quitarle el perfecto sacrificio de su amor.

Isaías 53 es más que un conjunto de versos perfectamente expresados. Es más que símbolos e imágenes de excelente construcción artística.

Isaías 53 es la esencia de la vida

La luz de los hombres

El poema de salvación jamás antes visto.




 ISAIAS Capítulo 53

¿Quién ha creído a nuestro anuncio? ¿y sobre quién se ha manifestado el brazo de Jehová?

Subirá cual renuevo delante de él, y como raíz de tierra seca; no hay parecer en él, ni hermosura; le veremos, mas sin atractivo para que le deseemos.

Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que escondimos de él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos.

Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido.

Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.

Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.

Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca.

Por cárcel y por juicio fue quitado; y su generación, ¿quién la contará? Porque fue cortado de la tierra de los vivientes, y por la rebelión de mi pueblo fue herido.

Y se dispuso con los impíos su sepultura, mas con los ricos fue en su muerte; aunque nunca hizo maldad, ni hubo engaño en su boca.

Con todo eso, Jehová quiso quebrantarlo, sujetándole a padecimiento. Cuando haya puesto su vida en expiación por el pecado, verá linaje, vivirá por largos días, y la voluntad de Jehová será en su mano prosperada.

Verá el fruto de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho; por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades de ellos.

Por tanto, yo le daré parte con los grandes, y con los fuertes repartirá despojos; por cuanto derramó su vida hasta la muerte, y fue contado con los pecadores, habiendo él llevado el pecado de muchos, y orado por los transgresores.







EL PURO AFECTO DE SU VOLUNTAD



Entre charcos de orín, yace la desgracia. Se le puede ver con su traje nauseabundo y sus ojos sin gracia. Transeúntes pasan al lado de ella y escupen su piel purulenta de la cual hilos de pus se le desprenden.

Así yace la desgracia entre los rincones de la ciudad. Su corazón enmohecido no pide más; hace mucho dejo de saber quién es. La única certeza es el lastre que carga a cuestas: años y años de soledad.

Hasta las ratas huyen al verle, pues al caminar sus huesos crujen como rompimiento de cráneos de pájaros ¿quien se apiadara de ella? Es un fantasma que hace mucho tiempo murió y hoy vaga entre sombras espesas y pesadas que la cubren como si fuera un parasito.

Por las noches la he visto llorar y he visto salir de su pecho parvadas de cuervos y las lagrimas que ruedan son arañas negras y peludas picoteando sus afligidos sueños.

Encorvada como anciana decrepita, con sus huesos molidos por dentro, la veo cual vil gusano arrastrándose en la humedad del suelo mojado y así las horas pasan a sorbos amargos quemándole las entrañas como fuego.

Hoy decidí visitarla; ungir con aceite su piel deshidratada. Apenas puedo tocarla pues todo su ser es una llaga. Le soplo mi aliento y gotas de colirio le desprenden de los ojos, costras de sarro y miedos.

Las escamas de su cuerpo las quito con mi amoroso acento y todo aquel cuerpecito endeble que un día fue la desgracia se mueve otra vez con gracia y aunque es fétido su olor, limpio su hediondez con mi sangre derramada
                                                   Justo en el milagro de mi amor.




triptico de mi salvacion



ESCRITO POR: PALABRALIMPIA


Tríptico de mi salvación
1

Mi salvación,
No vino del constante caminar
entre el fuego que calcina
Ni de mi alma ajada
como trapo inmundo

No por el color carmesí de mis tristes días
No del cristal liquido de mis sueños rotos.



Mi salvación no vino envuelta en seda
Ni con remitente de un país lejano,
No hubo ni bombos ni platillos
                 que anunciaran un festejo.

Sobre mi ; callo su luz
y como si volviera a nacer
contemple su rostro refulgente

Fue entonces, QUE UN GRITO PROFUNDO DE DOLOR
salió de mis entrañas

                            Y llore, llore, como un niño recién nacido.



2

En ti cabe mi angustia.
                              La pesadumbre

de la imperfección que me persigue.

Más aun así; manso y humilde

                             cargas mi carga.

3

A veces olvido que estaba muerto
y que hoy brotan dentro de mi ríos de agua viva.
Muchas otras veces, a la verdad
ni siquiera recuerdo
que por tu llaga fuimos sanados.

Perdóname señor

Por mi fuiste oprobio de los hombres
Fuiste gusano puesto en medio del polvo de la muerte.
Por mi dejaste que perros te rodearan
                       Y que cuadrillas de malvados
                       horadaran tus manos y tus pies

Por mi señor; dejaste que todos tus huesos se descoyuntaran.
Por mí y solo por mí
Fuiste molido, desfigurado mas allá del parecer humano.


A veces olvido que estaba muerto
Ayúdame señor a no esconder mi rostro
                                    a no olvidar que por causa de mi
                                    Enmudeciste, no abriste la boca delante de mis trasquiladores

Me salvaste, caminando por mí, como cordero al matadero.


Presentación1

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La grandeza de Dios en nosotros; vasijas de barro.

Cuán grande es Dios.

La ternura de un recién nacido colma de bendición el hogar, trae dicha para cada miembro que goza al ver el milagro de la vida de una forma muy literal. Estoy emocionado porque vino mi segundo milagro de vida en mi hogar, y llegó varón, cómo mi oración contestada. Al nacer, fui a la florería y seleccioné un pequeño “cactus”, y entregué a mi esposa tan singular planta diciendo: “Tengo mi nopal”, y gozamos de tan singular evento.

Gloria a Dios por sus bondades y por la grandeza de Su Poder. Vamos a casa y disfrutamos cada momento de ese dulce rostro…un día…dos días…la dicha aumenta y el gozo se multiplica por los planes que se van haciendo. La cámara fotográfica aún tiene rollo y requerimos de más tomas para completar y llevar al laboratorio. Con el esfuerzo que implicaba y la alegría que nos embargaba, llevo el rollo a revelar y con la esperanza de que todas las tomas fuesen las deseadas. Llega el día para recoger las fotografías (los tiempos de hoy, tú eliges qué foto imprimir). Mi desilusión y reclamo al responsable del laboratorio es porque las fotos están muy iluminadas, y precisamente el rostro de mi bebé es el que no tiene definición.

Está en brazos de mi mujer, y por qué siendo el mismo momento y el mismo espacio la misma luminosidad, sólo su rostro de mi hijo…así está el negativo amigo y no es problema de usted ni de la cámara…no hay explicación. Con resignación acepto y aún tengo mi cámara lista con otro rollo…el día nueve solicité a unos amigos que por favor buscaran para nosotros un turno en el Registro Civil para que temprano llegásemos y no tener problemas en la fila. Así muy temprano partimos con cierto pendiente, pues la noche no había sido muy cómoda para mi hijo, pero con la delicadeza y emoción de su registro partimos muy de mañana…a unos cuarenta minutos sobre carretera, mi esposa me dice; “el niño se ve mal”, sólo emite un sonido como quejándose y siento que no puede respirar bien…voy a acelerar para llegar al próximo pueblo…oren mientras, mis suegros nos acompañaban y sentíamos que el camino se alargaba…al fin llegamos a ese pueblo donde de inmediato me dirigí a donde imaginé que estaría un Hospital, una doctora sale y dice estoy con una paciente de parto y por lo que veo su hijo necesita oxigeno, mire allá está una farmacia, arriba vive el Doctor y tiene el equipo necesario…corra, y mi esposa con mi hijo en brazos corre hasta llegar…tocamos el “timbre” en la puerta y efectivamente en la parte superior de la farmacia se asoma un adormilado hombre y pregunta nuestra necesidad…y una vez que nos escucha; nos dice: “no puedo atender porque no tengo enfermera”, y se vuelve. ¡Qué desesperación! Tener la persona indicada para atender a un paciente indefenso, y a unos padres inexpertos…y sólo dice este médico, no tengo enfermera…vamos al próximo pueblo…entre una ciudad y otra había unos pocos kilómetros de diferencia y elegimos la más “cercana” que pareció la más distante. Ese vehículo no lo había corrido nunca a velocidad alta, por el peso y el “camper” que era viejo de construcción, pero ese día y para esos años la velocidad de 130 kilómetros por hora en una carretera sencilla se me hizo lenta. Hasta aquí mis pensamientos y corazón puestos en Dios parecían muy turbios, no dudé que era la mejor forma de avanzar. Cuando llegamos al hospital nos reciben al bebé, intentan reanimarlo, y justo cuando el Pediatra lo pone en sus brazos dice: “Ya está”, ¿vive Doctor? Pregunté, no, me dice: “ya murió”, justo en ese mismo instante que trata de ponerlo en mis brazos y veo movimiento en su bracito y le digo con entusiasmo; “movió su brazo”, es normal por los reflejos me replica el Doctor. ¿Llamamos al ministerio?, en mi ignorancia y en el dolor, sólo dije no, nos vamos a casa…silencio hacia el carro y justo cuando subo al volante inserto un audio en el estéreo y la melodía que inicia es “Señor mi Dios, al contemplar los cielos, el firmamento y las estrellas mil; al oír tu voz en los potentes truenos y ver brillar el sol en su cenit. Mi corazón entona la canción, cuán grande es Él, cuán grande es Él… Mi hijo Leonel Isaí lo comparo con la vida corta de un pequeño en la historia de Israel en I Reyes 14:13…”sólo en él fue hallado algo bueno hacia el Señor Dios…”

Aún lloro, por mi hijo; no pude hacer nada, no recibí ayuda, y Dios sigue siendo muy Grande y mi alabanza por Sus designios no quiero perderla. Soy vasija de barro y el Poder del Señor que está en mí es exaltado para testimonio de Su Grandeza y para que la Luz del Evangelio siga resplandeciendo. (Leonel Ch Rubio)

PORQUE YO SOY TU DIOS


Salmos 46:1 Dios es nuestro amparo y fortaleza,
Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.

salmos46:2 Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida,
Y se traspasen los montes al corazón del mar;

salmos 46:3. Aunque bramen y se turben sus aguas,
Y tiemblen los montes a causa de su braveza.
 
 
salmo 103:3 El es quien perdona todas tus iniquidades,
El que sana todas tus dolencias;


salmo103:4 El que rescata del hoyo tu vida,
El que te corona de favores y misericordias;


salmo103:5 El que sacia de bien tu boca
De modo que te rejuvenezcas como el águila.

Salmos 56:11 En Dios he confiado; no temeré; ¿Qué puede hacerme el hombre?


isaias 41:10. No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.


isaias 41:13 Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo.